La reforma de los planes de pensiones, establecida en el Real Decreto 62/2018, introdujo una serie de cambios significativos que afectarán a los ahorradores a partir de 2025. Enre los más destacados, se encuentra la posibilidad de rescatar las aportaciones realizadas a planes de pensiones que tengan al menos 10 años de antigüedad, sin necesidad de cumplir las condiciones especiales que antes se exigían, como jubilación, invalidez o desempleo de larga duración.
Índice de contenidos
- Mayor flexibilidad para rescatar el ahorro
- Cambios introducidos por el Real Decreto 62/2018
- Cómo se calcula el rescate
- Fiscalidad del rescate a los 10 años
- Opciones de rescate: renta, capital o mixta
- Reducción fiscal del 40% para aportaciones anteriores a 2007
- Consideraciones fiscales y alternativas de inversión
Mayor flexibilidad para rescatar el ahorro
Tradicionalmente, los planes de pensiones solo permitían su rescate en situaciones excepcionales, como la jubilación, incapacidad, enfermedad grave o fallecimiento del titular. Sin embargo, a partir de 2025, los partícipes podrán retirar las aportaciones con una antigüedad mínima de 10 años, sin necesidad de justificar ningún motivo ante la entidad financiera. Esto otorga una flexibilidad sin precedentes para acceder al ahorro acumulado en estos productos.
Cambios introducidos por el Real Decreto 62/2018
La reforma de 2014 y su posterior implementación con el Real Decreto 62/2018 introdujeron dos cambios fundamentales para los planes de pensiones:
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Posibilidad de rescatar aportaciones a los 10 años: Las aportaciones realizadas antes de 2015 podrán rescatarse a partir de 2025. Las aportaciones hechas en 2016 podrán retirarse en 2026, y así sucesivamente. Este nuevo marco de liquidez transforma los planes de pensiones en una herramienta más flexible para los ahorradores.
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Reducción de las comisiones de gestión: Las comisiones de gestión se han reducido, pasando del 1,5% al 1,25% de promedio, con una reducción adicional en los fondos de renta fija, donde las comisiones pueden llegar al 0,85%. Este ajuste ya es efectivo desde 2018 y tiene como objetivo hacer que los planes de pensiones sean una opción de ahorro más competitiva.
Cómo se calcula el rescate
Al rescatar las aportaciones, los partícipes podrán recuperar la inversión realizada, junto con la revalorización obtenida durante los 10 años de permanencia en el fondo. El monto rescatable dependerá del número de participaciones adquiridas y su valor actualizado en el momento del rescate. Esta medida tiene como fin darle más dinamismo y liquidez a los planes, facilitando su uso como herramienta de ahorro a largo plazo.
Fiscalidad del rescate a los 10 años
Aunque la nueva normativa aumenta la liquidez de los planes de pensiones, la fiscalidad del rescate sigue siendo la misma que en los casos tradicionales de jubilación. El dinero retirado se considera rendimiento del trabajo y se integra en la base general del IRPF, lo que significa que tributará entre el 19% y el 47%, dependiendo de los tramos aplicables.
Es importante tener en cuenta que el rescate de un plan de pensiones puede contar como segundo pagador en la declaración de la renta, lo que podría afectar la obligación de presentar la declaración si el total rescatado supera ciertos límites.
Opciones de rescate: renta, capital o mixta
A la hora de retirar el dinero, los partícipes podrán optar por tres modalidades de rescate:
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En forma de renta: Permite recibir pagos periódicos, lo que puede resultar fiscalmente ventajoso, ya que el impuesto se aplicará de manera progresiva y ajustada a los tramos de la base imponible.
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En forma de capital: Consiste en rescatar el dinero de golpe, lo que podría aumentar significativamente la base imponible y, por tanto, el tipo marginal aplicable.
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Rescate mixto: Combina ambas modalidades, permitiendo obtener una parte en capital y otra en forma de renta.
Reducción fiscal del 40% para aportaciones anteriores a 2007
Una ventaja interesante para quienes realizaron aportaciones antes del 31 de diciembre de 2006 es la reducción fiscal del 40% sobre las cantidades rescatadas. Esto implica que, al retirar los fondos, solo se tributa por el 60% del importe. No obstante, es necesario evaluar cuidadosamente el impacto fiscal, ya que rescatar un monto elevado podría hacer que el contribuyente pase a un tramo impositivo superior.
Consideraciones fiscales y alternativas de inversión
Antes de decidir rescatar un plan de pensiones con más de 10 años de antigüedad, es fundamental analizar las implicaciones fiscales. Rescatar el plan antes de la jubilación puede generar una carga fiscal mayor que esperar a la jubilación, debido a que el IRPF aplicado a los salarios suele ser más alto que el correspondiente a una pensión.
Además, es importante valorar el coste de oportunidad. Mantener el dinero en un plan de pensiones implica seguir invirtiendo en un producto con rentabilidad variable y comisiones. Por ello, podría ser más rentable considerar otras alternativas de inversión, como fondos de inversión o carteras indexadas, dependiendo del perfil de riesgo y los objetivos del inversor.
La posibilidad de rescatar aportaciones a planes de pensiones con más de 10 años de antigüedad, a partir de 2025, es un avance importante que aumenta la flexibilidad de estos productos de ahorro. Sin embargo, los partícipes deben evaluar cuidadosamente las implicaciones fiscales y otras alternativas de inversión antes de tomar una decisión, para maximizar el rendimiento de su ahorro y optimizar su planificación financiera.
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